No es que no sepas escuchar... pero cuando alguien te reclama por no hacerlo, el problema no es falta de intención. En realidad, en lugar de oír a tu interlocutor, se te cruza en el camino un diablito... uno de los siete diablitos que hacen que tu comunicación se vaya, literalmente, al diablo.
Te presentamos a los 7 diablitos para que identifiques los dos o tres que más se interponen en tu camino para lograr escuchar verdaderamente:
- El diablito “Comparador”: aprovecha la mínima pausa para contar una anécdota propia. ¿Que tu interlocutor se mudó de ciudad? Pues él también, y te lo va a contar de inmediato.
- El diablito “Terminador”: no deja que la otra persona termine de hablar. Su lema es "Te entiendo, no hace falta que expliques". Suena eficiente, pero en realidad, atropella la conversación.
- El diablito “Consejero”: escucha solo lo necesario para empezar a recetar soluciones, sin importar si el otro quiere oír consejos.
- El diablito “Juez”: analiza, critica y sentencia. Todo mientras su interlocutor sigue hablando.
- El diablito “Abogado”: mientras escucha, ya está preparando argumentos para defenderse o ganar la discusión. Su enfoque es la victoria, no la comprensión.
- El diablito “Traductor”: interpreta lo que el otro dice y le da un giro propio. El problema es que, al final, ni siquiera queda claro quién dijo qué.
- El diablito “Soñador”: una palabra dispara su imaginación, y se va por las nubes, regresando solo al final, cuando todo ha terminado.
EL RETO DE LA SEMANA
Esta semana te invitamos a que identifiques tus dos diablitos más fuertes. Casi todos tenemos todos los diablitos pero siempre hay un par que se pelean por el protagonismo en tu cabeza.
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