¿El huevo o la gallina?

En nuestro seminario de presentaciones, cuando impartimos el módulo de Cómo ser un Presentador Poderoso, hacemos una serie de dinámicas que pretenden ejercitar en los participantes todo lo relacionado a gesticulación, manejo de la vos y postura.

Para esta última, hablamos de la importancia de asumir una postura recta, que transmita seguridad, con los dos pies anclados, la espalda recta y la cabeza erguida entre otros.

Y en algún momento del proceso, invariablemente surge la siguiente pregunta: ¿Qué es primero, la postura o la seguridad?

Lo que hay detrás de este interrogante es muy interesante porque sucede lo mismo que con el huevo y la gallina.

¿Los presentadores seguros de si mismos asumen posturas poderosas naturalmente? o, ¿asumir una postura poderosa te hace sentirte seguro al presentar?

Y la respuesta correcta es… las dos son correctas.

Un presentador que se siente seguro al presentar asume naturalmente posturas poderosas porque está transmitiendo a través de ellas esa seguridad.

Por su parte, un presentador que se siente inseguro puede asumir conscientemente posturas poderosas que mandarán un mensaje al cerebro ayudándole a adquirir mayor seguridad en el escenario.

Así que, entre más practiquemos posturas de seguridad, más vamos a sentirnos seguros y a desempeñarnos mucho mejor en nuestras presentaciones.

EL RETO DE LA SEMANA

Esta semana vas a observar en ti y en los demás, las posturas que asumes al hacer presentaciones y, ¡por favor! evita el balanceo entre una y otra pierna o las manos entre los bolsillos.

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