En la vida salvaje, el animal que se queda fuera de la manada y desprotegido, es al que los leones se comen primero.
Traemos impreso en nuestra genética el temor a salirnos de la manada. A mostrarnos vulnerables y ser presa fácil de los depredadores. Esta es una de las razones por las cuales hablar en público es tan intimidante. Es más fácil estar agachados, hacer parte de la manada, pasar desapercibidos.
Pararnos frente a los demás, expuestos y vulnerables, puede ser aterrorizante.
A no ser, que en lugar de cebra, seas el león. Cuando no eres la presa atemorizada sino el animal que tiene el poder, caminas por la vida de una manera diferente.
Mientras estés encorvado, agachado, temeroso, tu cuerpo genera cortisol. En cambio, cuando te paras derecho, con los hombros hacia atrás, mirando de frente y sin temor, tu cuerpo genera serotonina. Te sientes más valiente, poderoso y confiado.
La mente y el cuerpo están profundamente conectados. Cuando adoptas una postura poderosa, estás enviándole una señal a tu cerebro qué le dice que estás listo para enfrentar cualquier cosa, para lograr tus metas, para no dejarte intimidar.
Una postura poderosa es al mismo tiempo la causa y la consecuencia de la forma cómo te sientes por dentro y, por lo tanto, de la forma en que enfrentas la vida.
Jordan Peterson, en su libro 12 rules for life lo expresa maravillosamente: “…presta atención a tu postura. Deja de encorvarte y encorvarte. Di lo que piensas. Plantea tus deseos, como si tuvieras derecho a ellos, al menos el mismo derecho que los demás. Camina erguido y mira de frente. Atrévete a ser peligroso. Anima a la serotonina a fluir abundantemente por las vías neuronales desesperadas por su influencia calmante».
EL RETO PARA ESTA SEMANA:
Esta semana párate erguido. Mira de frente. Enfrenta la vida, las situaciones y las relaciones como si fueras el león y no la cebra. Imagina que tienes un hilo que sale de la coronilla y llega hasta el cielo y que ese hilo te mantiene derecho, relajado, pero bien parado.
MÓDULOS DO IT SOBRE EL TEMA
Presentaciones Neuro Poderosas enseña a vencer el temor a pararse frente a una audiencia y hablar en público. Los participantes se dan cuenta de sus posturas habituales y las cambian por posturas poderosas. Aprenden cómo los diferentes neurotransmisores los afectan y descubren cómo liberar las moléculas que les son más útiles a la hora de presentar en público.
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Excelente motivación, en este momento estoy buscando tomar riendas de mi destino, de lo que quiero vivir y alcanzar, y no solo dejarme llevar por las olas de la vida que pasa solo una vez y termina.
Aparte de ser un excelente consejo es también un buen ejemplo para vencer el pánico escénico, que en la actualidad se presenta mucho a nivel escolar, desde primaria hasta profesional.
Buenas tardes, gracias por enseñarnos tanto y hacer que nos llenemos de serotonina.
Soy un león