Una opinión bien expresada tiene siempre dos partes: el aporte y el soporte.
El aporte es lo que estás entregándole al otro, tu opinión, tu punto de vista, mientras que el soporte es la manera en que sustentas el aporte, demostrando que hay un razonamiento lógico detrás.

Tú, ¿eres de los que va directo al grano o de los que dan vueltas y vueltas antes de que los demás puedan saber para dónde vas?
La mayoría de las personas que hablan más de la cuenta no son conscientes de ello y por eso…